Durante meses he prometido sellar todas las ventanas para que ya no puedas entrar. Nunca lo hice, en el fondo "mio cuore" siempre te espera, a la misma hora.
He reseteado varias veces tus recuerdos de mi mente, sin embargo, basta que el empecinado corazón se ponga a bailotear entre el sístole y el diástole y todo vuelve a comenzar. Te cuelas por mis capilares. ¿Cómo lo logras?
Todas las semanas mi mente se pone a planificar lo que te dirá la próxima vez que te vea. Quejas, lamentos, reclamos, todo. La lista es larga. En un rinconcito, "mio cuore" se ahoga en un mar de suspiros.
Esta debería ser una noche como otras, tranquila, sosegada, ocupando mi tiempo en leer algún texto o escribir algún artículo pal' Feisbú o pal' blog. Intento garabatear las primeras ideas. Lentamente se van dibujando, una, dos, tres frases. Se van uniendo, algo va apareciendo, hasta que de pronto llegan las melodías, y tú con ellas. Me pierdo.Y entonces las palabras llegan floridas, llenas de dingolondangos.
Siempre logras inspirarme. ¿Cómo lo haces? ¿Me has embrujado?
Siempre he querido marcharme lejos para que no me encuentres. A Saturno o a la galaxia Andrómeda, por ejemplo. Y cuando ya estaba en mi habitáculo para mi viaje interestelar, siempre me has descubierto y ya no he podido marcharme. ¿Será el color de tus ojos o esa forma premeditada con que me miran?
No te abuses, un día me voy a cansar y me marcharé para siempre. No habrá bemoles que me detengan. Y cuando ese día llegue, no regresaré y entonces sí, mí cerebelo se reseteará definitivamente y para siempre.
Es la hora de irme a dormir, mañana madrugaré.
La ventana, la dejaré "juntita", ya sé que regresarás como siempre. Debe ser cierto eso que dicen "aquél que se va sin que lo echen, regresa sin que lo llamen. No te abuses, por que un día quizás me dé un poco de frio y cerraré la ventana. ¿Algún día usarás las puertas como todo el mundo?
©Miguel Ángel Villegas.
(PD: Un texto y una canción que publiqué hace dos años, el 11 de junio)
