La rosa que conozco
No es blanca, ni roja,
Ni amarilla.
No es frágil,
Ni tiene los labios secos.
Tampoco es un graffiti,
Ni una aspirina
Para el dolor del olvido.
I
En ella conviven los milagros.
Tan porfiada
Tan loca
Tan hermosa
Y hay que mirarla sin respiro.
II
En ella los ángulos no son rectos
Ni el amor es un juego o un diluvio
Su encanto es integral
Todo o nada
Y nunca guarda la ternura para luego.
III
A esta rosa
(mi Rosa)
no voy a venderla
Nunca, nunca.
Copyright-2008 © Guillermo Ventura.