𝐄𝐒𝐓𝐀𝐌𝐎𝐒 𝐉𝐎𝐃𝐈𝐃𝐎𝐒, 𝐍𝐎𝐒 𝐄𝐒𝐓Á𝐍 𝐁𝐎𝐋𝐔𝐃𝐄𝐀𝐍𝐃𝐎

Cuando el chismoso de “Feisbú” me hizo llegar la información de las palabras de la señora presidente en el Departamento de la Libertad: "Usted es el papá de La Libertad, yo soy la mamá de todo el Perú", pensé que era un chiste o el típico meme que suelen hacer los internautas para mofarse de alguna situación presidencial.

Sin embargo, resulta que efectivamente eran palabras textuales de Dina Boluarte dichas en la ceremonia de firma del acta para la ejecución del proyecto Chavimochic III en el departamento de la Libertad (Perú). 

Se lo dijo al Gobernador César Acuña, el de “Plata como cancha”.

- Estamos Jodidos- pensé.

No voy a hacer una enumeración de todas las barbaridades que ha hecho el señor Acuña, que, en lugar de enojo, da risa. Ya sabemos que no hay nada deslumbrante que podemos esperar de él, es el perfecto ejemplo del “Hombre mediocre” descrito por el escritor argentino José Ingenieros en los albores del 1900, pero que hoy, sigue vigente, además, sigue alimentándose y creciendo. 

Tampoco voy a hacer una enumeración de todo lo que ha dicho la señora presidente, comprendo que ella gobierna para otro país, para otra realidad, otra dimensión. 

Aún no he logrado descifrar ¿para cual dimensión?

Lo que sí me ha sorprendido es que ella se ha endilgado un título que no posee: “Madre de todos los peruanos”.

!Válgame dios!

De un solo tiro a “matado a mi madre”, bueno, ella está a acostumbrada a matar, sobre todo a matar a sus hijos. 

Su mediocridad no le permite ver su verdadero rol en la historia del Perú. Su gobierno asesinó a mas de sesenta (60) ciudadanos, a quienes ella llama “hijos”. Ha tenido el Tupé de decir que “Los muertos fueron los culpables de sus asesinatos”

Cuando leí las palabras dichas por la presidente “…yo soy la mamá de todo el Perú”

-Ella es la madrastra- fue lo primero que pensé

Pero, no es cualquier madrastra. 

Dina Boluarte es como Grimanesa Arangoitia, la Madrastra de José María Arguedas, quien no  tenía ni un solo sentimiento de afecto por el futuro escritor y mandó que no viviera en la casa principal, sino con los sirvientes, lugar donde el “Taita Arguedas” aprendió a hablar quechua con fluidez.

Espero que en ninguna vida y en ninguna dimensión me toque una madrastra como Grimanesa Arangoitia ni me vuelva a tocar una presidente como Dina Boluarte. 

No soy tan religioso, pero si existe algún requisito para lograrlo, háganmelo saber. Además, si fuera necesario, prometo volver a misa los domingos, confesarme una vez al mes, acompañar la procesión del señor de los Milagros y mudarme a la ermita de Santa Rosa de Lima (si me deja el alcalde "Don Porki", otro mamarracho).

Me siento sano emocionalmente, si la Señora fuera mi madre (que por suerte no lo es) lo llevaría donde un buen Psiquiatra, pero de esos profesionales que no sean “Pistoleros de la salud”, es decir, que, a la primera, ya te están mandando a tomar pastillas. Le pediría al Psiquiatra que intente descubrir la patología y los traumas de la señora presidente. Debe tener muchos. 

“Madre hay una sola”, dice el refrán. ¡Que suerte tengo de tener a “Doña Mache” como mi madre!

Que mala suerte tienen ustedes (“Peruchitos”, “Peruleros”, Peruavianos”, “Peruanos”, gentilicio de Peruano según la RAE), de tener como madre a Dina Boludearte.

©Miguel Ángel Villegas
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